Luego de vencer a Venezuela y pasar a cuartos, espera por Polonia y rivales en la siguiente fase. Además, podría clasificarse a los JJOO este domingo.
La Selección Argentina de Basquet obtuvo una sólida ventaja ante Venezuela, luego de la difícil Rusia. En un partido que parecía que se iba a complicar, por un inicio vertiginoso de ambos seleccionados, y tras el golpe en el tobillo que sufrió Facundo Campazzo, el equipo supo reponerse teniendo a Luis Scola y Delía como bandera ofensiva. Con una Venezuela incisiva y decidida a aprovechar las incertidumbres de "El Alma", el partido se mantuvo vibrante y friccionado terminando el parcial 17-12.
En el segundo cuarto, con el reingreso de Campazzo sufriendo molestias pero ya recuperado, la Selección logró salir de esa burbuja y el equipo de Sergio Hernández logró una máxima de 13 puntos de diferencia. A pesar de sufrir en el rebote ofensivo, pudo mantener ese colchón de ventaja hasta el medio tiempo. Venezuela forzó a la albiceleste a realizar tiros del borde externo, incómodos y sobre la chicharra, lo que provocó una poca efectividad en este apartado. Más allá del plan "vino tinto", "El Alma", con su jerarquía ofensiva y su renovada faceta ofensiva, logró romper los esquemas y le hizo perder su eje a Venezuela.
En el complemento Argentina, lejos de relajarse tomó por completo el ritmo de juego, consciente de su ventaja, llevaron el juego a una diferencia de 18 (54-36 a falta de 5' 17''), con un Campazzo y Garino prendidos fuego. El continuo desgaste de Venezuela forzó pequeños errores que fueron subsanados bajo los ataques de Gabi Deck y el silencioso aporte defensivo de Delía y Brussino.
Este último aspecto es importante partiendo del hecho de que era el área que más preocupaba al cuerpo técnico previo inicio de la competición. La defensa se fue aceitando, haciendo énfasis en sus virtudes y era el escalón que faltaba subir para ser un equipo aún más competitivo. Está claro que falta mejorar, teniendo en cuenta los equipos repletos de estrellas que pueden venir y que no van a perdonar las "siestas" defensivas, pero Argentina está en un sendero de mejora constante, lo cual da esperanzas.
El equipo, que siempre mantuvo el orden, la calma y la paciencia, llevó a Venezuela hacia el abismo y ya no pudo volver. La selección logró su pase a cuartos de final por 87 a 67.
¿Próximo Rival?
Ahora se enfrentan a Polonia, este domingo a las 09:00 am. para lograr quedarse primeros en su grupo.
Los de Europa del este, proponen un juego muy físico. Su presencia en el mundial es apenas la segunda en su historia y llega como la cenicienta del torneo, un equipo muy subestimado, pero que puede dar la sorpresa. Es un equipo que busca el bloque central con el balón en poder de sus dos creadores Aj Slaughter, su conductor y Mateusz Ponitka, uno de los máximos anotadores del mundial. A partir de estos jugadores es de donde nace toda acción polaca, ya sea para anotar o crear situaciones. Son un equipo vertical y aprovechan la formación de cuatro abiertos para jugar de Pick and Roll con espacios bien ocupados, porque sus internos juegan tanto dentro de la pintura, como fuera del perímetro.
¿Qué es lo que sigue?
La situación entonces es la siguiente. En cuanto al Mundial, si el equipo de la "Oveja" Hernández le gana a Polonia, jugará el martes a las 8 en Dongguan con el segundo de la zona J, que incluye a Serbia, España, Puerto Rico e Italia. En caso de perder, enfrentarán al líder de ese escenario desde las 10 en Shanghai, buscando un lugar entre los cuatro mejores del mundo.
Si hablamos de la situación de cara a los JJOO de Tokyo 2020, donde América tiene solo 2 plazas otorgadas por mundial y con un triunfo de República Checa frente a Brasil, Argentina está casi adentro.
Este domingo juegan los Checos contra Grecia. Si el equipo griego resulta vencedor, Brasil está obligado a ganarle a USA para pasar de fase.
En definitiva, si gana República Checa y los nuestros le ganan a Polonia, Argentina podría tener doble premio este domingo.
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